Friday, January 14, 2005

Lapislázuli



Empapadme de luz, cielo lapislázuli! Pues aquel arbusto dorado que riegas con tu pasión se retuerce inerte entre las sombras de un sueño trillado derrochando tu felicidad, y mientras meces con tu aliento la cegadora luz plateada que brilla en sus colores intermitentes un águila confundida agoniza postrada en tu techo etéreo. Yo quiero compartir ese mundo sensual, quiero entrar en aquella vida invisible, en aquella perfección que habita sólo las almas más puras! Empapadme de fe! Cual es la razón de tu belleza, si no la de fulminar las viejas tablas o al menos macerar su polvo y perderlo en el tiempo, echando tu fiel escencia sobre la mentira y lo impío? Ya atravesarte te dejas por las amarillas varas de un cadaver luminoso que nos engaña haciéndonos pensar que renace? O es que percibo las cenizas de una batalla sangrienta que se libra allí en lo alto cada vez que parpadeo? Soy yo el sentido de tu existencia, y os intimo a hincaros ante la vida visible que pisa este suelo mágico inminentemente. Os intimo a hincaros y derramar vuestra luz sobre esta humillada masa corpórea de ilusiones apagadas. Empapadme de luz! Y hazlo como nunca lo has hecho, y olvida el arbusto, déjalo revolcarse en su patetismo y su ridiculez, traiciona aquel águila y no le des más cobijo en tu cálido manto, haz ver al vil cadáver que ha llegado su hora moritoria, abandona el mismo tiempo a su suerte e híncate virtiendo tu celosa luz sobre mi! Os lo ruego encarecidamente!

2 comments:

Mynna said...

HMmm....interesante vista sobre el cielo...interesante vista sobre ti, interesante escrito...leerlo fue un placer...
Besos al autor

Anonymous said...

no está mal. el rococó no es mi estilo pero debo reconocer que puedo convivir con él durante unas líneas.